El
cantante Dyango, nombre artístico de
José Gómez Romero, participará, henchido de orgullo patrio, en el concierto Por la Libertad, entiéndase, Por la
Independencia, que organiza el incombustible Lluis Llach,
a celebrar en el Camp Nou el próximo
día 29 de junio.
Dyango, que representó a España en el Festival
de la OTI hará
cosa de 30 años, ha cambiado de registro melódico y ahora es un fervoroso
partidario de la independencia de Cataluña, esto es, un rapsoda de las
libertades nacionales conculcadas por el enemigo externo, por esa meticona
España que nos expolia desde la noche de los tiempos. Sin duda, el intérprete,
en el declive de su carrera por razones de edad, nació en 1940, 73 castañas a
cuestas, aspira a cerrar actuaciones en esas galas familiares de TV3, ideales
para la noche de los sábados, o una docena de bolos veraniegos en las fiestas
patronales, si los recortes no las cancelan, de Oix, Tortellà, Capolat o Sant
Aniol de Finestres… pues no parece que más allá del Ebro se disputen su
presencia en los programas festivos del mes de agosto.
Sorprende
menos la participación en el evento de Peret,
Pere Pubill Calaf, catalanista furibundo de nueva hora que en su día fue
forzado por el Estado opresor, quizá a punta de pistola, a que le representara
en el Festival de Eurovisión, Canta y sé
feliz, tras el éxito desconcertante de su tema… -hit inolvidable de la canción protesta con mensaje subliminal
hipernacionalista-… Borriquito como tú, tururú, que interpretó honrando
el uniforme del Tercio ante los legionarios acuartelados en El Aaiún días antes
de la
Marcha Verde
(véase el NO-DO), pues el maestro rumbero ya padeció antaño tormentosas crisis
de conciencia y de fe religiosa, y parece, a priori, más proclive a la mudanza
espiritual.
Es
seguro que Dyango, desmelenado y desencadenado, a quien le va al pelo
el título de la última película de Tarantino, eliminará de su repertorio uno de
sus éxitos más sonados, Suspiros de
España. Disfruten aquí la popular tonada si les place cultivar la
nostalgia.